Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy hablaremos sobre un tema importante en nuestra vida espiritual: la regeneración. ¿Qué es la regeneración? Es un proceso por el cual Dios nos transforma de manera sobrenatural y nos hace nacer de nuevo en su Espíritu.
En el Evangelio de Juan, Jesús habla sobre la necesidad de nacer de nuevo. En Juan 3:3-5, dice: «De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios». Nicodemo, un fariseo que habló con Jesús, no entendió cómo esto era posible. Jesús le explicó que el nacimiento espiritual es un trabajo del Espíritu Santo, y que quien nace del Espíritu es como el viento, que sopla donde quiere.
Así que, la regeneración espiritual es una obra sobrenatural del Espíritu Santo en nuestra vida, que nos hace nacer de nuevo. Y esto es lo que nos permite entrar en el Reino de Dios.
¿Cómo ocurre la regeneración espiritual? Primero, debemos reconocer que estamos muertos en nuestros pecados. La Biblia dice en Efesios 2:1 que «estábamos muertos en nuestros delitos y pecados». Es decir, nuestra naturaleza espiritual está muerta, separada de Dios y en necesidad de ser revivida.
Pero gracias a la misericordia de Dios, Él nos ofrece vida a través de la fe en Jesucristo. La Biblia dice en Efesios 2:8-9 que «por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe». Al creer en Jesucristo, somos justificados y nuestros pecados son perdonados. Y entonces, el Espíritu Santo entra en nuestra vida y nos hace nacer de nuevo.
La regeneración espiritual tiene muchas consecuencias en nuestra vida. En primer lugar, nos da un nuevo corazón y una nueva naturaleza. Ya no somos esclavos del pecado, sino que somos libres para vivir en obediencia a Dios. En segundo lugar, nos da una nueva perspectiva sobre la vida y la eternidad. Sabemos que nuestra vida en esta tierra es temporal, y que nuestro verdadero hogar está en el cielo. En tercer lugar, nos da una nueva comunidad de hermanos y hermanas en Cristo, con quienes podemos crecer en nuestra fe y servir a Dios juntos.
Hermanos y hermanas, la regeneración espiritual es una obra maravillosa de Dios en nuestra vida. Es el inicio de un camino de transformación en el cual el Espíritu Santo nos guía y nos capacita para ser más como Cristo. Si aún no has experimentado la regeneración espiritual, hoy es el día para entregarte a Jesucristo y recibir esta nueva vida en Él. Y si ya has experimentado esta obra en tu vida, sigue caminando en fe y en obediencia, confiando en que Dios seguirá obrando en ti hasta el día en que Jesucristo regrese.